El término de hacking ético es cada vez más popular, se trata de una práctica a la que muchas empresas tecnológicas o con un nivel de digitalización elevado suelen recurrir
¿Qué es el hacking ético?
El hacking ético, también llamado de sombrero blanco, hace referencia al modo en que una persona, mejor conocida como hacker, utiliza todos sus conocimientos sobre informática y ciberseguridad para hallar vulnerabilidades o fallas de seguridad dentro de un sistema.
Los hackers éticos son expertos en seguridad de la información que irrumpen en los sistemas informáticos por petición de sus clientes. Se considera ética esta variable porque existe un consentimiento previo por parte de la “víctima”, es decir, el cliente, para detectar las fallas.
El objetivo de ello es comunicarlas a la organización que los contrata para que sepan qué no está funcionando y emprendan acciones que permitan evitar una catástrofe cibernética, como ser víctimas de robo de información muy importante.
La protección de los sistemas y redes actuales requiere una comprensión amplia de las estrategias de ataque y un conocimiento profundo de las tácticas, herramientas y motivaciones del pirata informático. El creciente uso de metodologías de ataque de ingeniería social exige que cada probador sea consciente de la organización y los hábitos de sus usuarios de TI (personal).
¿Qué es un test de penetración en hacking ético?
Los profesionales que se dedican al hacking ético ponen en marcha una serie de pruebas o test, llamados “test de penetración” con el fin de poder burlas las vallas de seguridad de las diferentes organizaciones para poner a prueba la efectividad de los sistemas de seguridad o demostrar sus debilidades.
Para conseguirlo, es necesario simular diferentes patrones de ataque empleando herramientas desarrolladas por métodos de ataque conocidos. Algunos de los componentes de un test de penetración son:
- Puertos de seguridad: cortafuegos, programas antivirus, filtros de paquetes, etc.
- Elementos de acoplamiento: puertos, conmutadores o routers.
- Servidores web, de base de datos, de archivos, etc.
- Equipos de telecomunicaciones.
- Aplicaciones web de todo tipo.
- Instalaciones de infraestructura: mecanismos de control de acceso.
- Conexiones inalámbricas: bluetooth, WLAN, etc.
Generalmente, los test de penetración se clasifican en:
- Pruebas de caja negra: los especialistas en hacking ético solo tienen a su disposición la dirección de la red, esto quiere decir que se realiza desde el punto de vista de las entradas y salidas que recibe o produce sin tomar en cuenta el funcionamiento interno.
- Pruebas de caja blanca: el punto de partida es un amplio conocimiento de los sistemas, como la IP, el software utilizado y los componentes de hardware, es decir, se llevan a cabo sobre las funciones internas.
Importancia del hacking ético para las organizaciones
El hacking ético, hoy en día, un elemento clave de los negocios, pues solo de esta forma pueden estar seguros de que su información no corre ningún tipo de riesgo.
El hacking ético te brinda múltiples beneficios. Algunos de los principales son:
- Ahorrar dinero en la implementación de sistemas de seguridad eficientes.
- Impedir catástrofes públicas por ser víctima de algún ataque hacker fuerte.
- Organizar y mantener los sistemas de ciberseguridad para evitar filtraciones.
- Focalizar las inversiones en seguridad eficientemente y no malgastar en sistemas con fallas.
- Concientizar a todos los colaboradores sobre la importancia que supone poner en riesgo los sistemas por el mal uso de contraseñas poco seguras.
En ocasiones se opta por personal interno, responsables dentro de la empresa de poner a prueba las vulnerabilidades de la infraestructura, pero también es complicado para Pymes, de menor tamaño. Por ello es posible que opten por recurrir a empresas de ciberseguridad que ofrecen un servicio de consultoría externo pero que les permita estar preparados para ataques de piratas con malas intenciones
Algunos de los puntos por los que son tan importantes estos especialistas son los siguientes:
- Proteger software y redes: A través del pentesting o testeo de penetración, estos profesionales pueden determinar en dónde están las debilidades en un sistema o en una aplicación. Esto ayuda a prevenir ciberataques reforzando toda la estructura interna de los sistemas y los servidores con los que cuenta las empresa en cuestión antes de que alguien pueda penetrar en el sistema y poner en riesgo a una organización.
- Cumplir con normativas: Generalmente, las entidades financieras y las empresas que fabrican y producen nuevos artículos, como softwares, plataformas o aplicaciones, están obligadas a cumplir con regulaciones para probar sus productos.
- Estar al día de los nuevos sistemas de penetración: Los hackers malintencionados todo el tiempo están actualizando y mejorando sus estrategias para infiltrarse en las diferentes plataformas y concretar sus amenazas, por lo que los sistemas deben ser continuamente probados.
- Entrenar la inteligencia artificial: Cada vez existen más herramientas automáticas enfocadas en la detección de vulnerabilidades, basadas en inteligencia artificial, las cuales pueden arrojar falsos positivos, es decir, detectan una anomalía que hace que pensar que existe un riesgo cuando no es verdad.